domingo, 1 de febrero de 2009

El ateo de sombrero de copa y gabán azul oscuro. por: Gestapo.

No poseíamos un almacenamiento de datos e igual que un androide, lo grandioso de estos, es su capacidad de memoria, ellos tienen el archivo. Su constitución era la asimilación de un cerebro humano –clonación- este cerebro encefálico estaba compuestos por diminutas y delgadas venas que no son sino miles de cables eléctricos que esparcen descargas de electrodos, la descarga eléctrica provenía de la fuente de poder, una especie de pila de unos cinco centímetros por uno de diámetro; el cerebro no estaba sólo constituido por estos miles de cables, también poseían venas naturales para la circulación de la sangre y además…-Por favor no me hagas escuchar más, además ellos ya no existen, fueron exterminados por los elegidos, los santos –decía el muchacho de gafas de marco grueso. -Tal vez tenga razón como tal vez no –dijo el hombre de sombrero de copa y gabán oscuro que estaba en las mismas sillas hilericas de espera con el sujeto a quien se dirigía, el sujeto de aspecto de universitario, que portaba en esos momentos un mamotreto libro de mitología humana.
–No puedo afirmarlo como certeza pero es muy lógico también –dirigiéndose al universitario, el muchacho deja el libro descansar en la mesita de las revistas y le dice al hombre de gabán y sombrero de copa: -No existen pruebas de que la tierra aún exista, en la cual estallo bajo el producto de las bombas de hidrogeno, y que rompió toda comunicación de vida para nuestros antepasados que pudieron escapar y refugiarsen para siempre en las células flotantes. No creo que las maquinas hayan podido resistir semejante monstruo de diez mil bombas atómicas, cada bomba de expansión de onda similar a la que lanzaron en Hiroshima en pleno siglo XX. –Claro, no tenemos pruebas pero también puede ser una probabilidad que aún estén habitando la tierra, ellas no necesitan de oxigeno, estoy seguro que aun ellas quieren venir y posesionarse de nuestra tecnología, el hombre tuvo que ingeniarse en su momento de guerra contra los robots, la forma de poder hacer aun más eficientes los viajes espaciales, nosotros los ciudadanos no sabemos verdaderamente como es la cuestión de saber con certeza en que parte del universo estamos con relación a donde estaba supuestamente el planeta tierra, que en la actualidad según las descripciones cartográficas de nuestras potentes computadoras, obviamente desprovistas de sentimientos, jeje –sonríe burlonamente el hombre de sombrero y prosigue -a lo que me refiero es que estas representaciones son mentiras, no sabemos con seguridad en que parte del universo nos encontramos por tal razón hemos perdido contacto con la tierra, sobre todo que las células flotantes están diseñadas para que sus habitantes no puedan salir al espacio exterior y la comunicación que tenemos con las ocho células más, son por vía satelital, en cualquier momento se perdería contacto por la misma distancia en que nos vayamos alejando una de las otras. Hace dos años perdimos contacto con Atenas, la tercera célula espacial, según los datos sabios de nuestras computadoras, fue devorada por un agujero negro –hace una pausa, el joven universitario lo mira con escepticismo pero no se atreve aún a dar su opinión.
Paso un lapso de silencio mientras esperaban que le tocara a cada uno el turno de visita al odontólogo, el supuesto universitario no aguantó más con la incertidumbre y rompe el silencio. –Disculpe, entonces cree que todo lo que creemos es un supuesto? que los antiguos textos sólo nos dice mentiras? Cómo puede usted explicarme esto.
-Bueno, ya que entramos en confianza, los textos antiguos, como lo que conocemos de los antiguos griegos y las escrituras bíblicas, fueron los únicos textos que seleccionaron nuestros sobrevivientes de la guerra en la tierra, ellos, que ahora debían educar una nueva raza humana, una raza humana que sería parte ya de su propio mundo natural inventado, lo que vivimos actualmente; en todo caso seleccionaron los libros más destacados de los antiguos griegos y cristianos para acomodarlos a sus falsos libros escritos por ellos mismos para que de algún modo se escribiera una especie de constitución, por que para mí, esa misma función cumplieron los textos sagrados de la antigüedad, constituciones ya que si no había ley ni dios, sólo reinaría el caos y el desacuerdo. –Entiendo –dijo el muchacho en posición tranquila y con rostro de sorprendido, aquel hombre de sombrero de copa cruza las piernas y apoya su codo para tocarse su prepotente barbilla y proseguir. –No estoy negando que como literatura, el libro de Xión es muy hermoso, nos promete la llegada al portal idílico, un mundo similar a nuestro antiguo paraíso, pero a su vez nos está encegueciendo como lo hicieron con nuestros antepasados. El hombre se quiere negar para el espacio exterior, ya no se quiere explorar el universo, como ya se sabe que podemos eternamente estabilizarnos, que nuestra tecnología no es un producto orgánico como nuestros cuerpos que tienen un comienzo y un final, esto nos hace eternos como especie humana enclaustrada en una célula flotante, todo es bello y perfectamente manipulado -el joven ve el reloj de pared y lo compara con el de su muñeca. –Disculpe señor, creo que he olvidado algo, debo irme. –Y vas a dejar que se te pierda el turno? –dice el hombre al supuesto joven universitario. –Lo otro me parece más importante que mis cordales, le pido disculpas y permiso –toma su libro y se retira de la sala de espera, el hombre de sombrero de copa toma un sorbo de su vaso de agua y sonríe como sonreiría cualesquier creyente de la palabra de Xión después de haber atraído al rebaño una oveja más, se abre la puerta automáticamente saliendo un pequeño niño con su madre, sus ojos llorosos y sobandoce su boca, una voz muy suave que salía del interior de aquel cuarto, pronunciaba el nombre del supuesto universitario, aquel hombre de sombrero de copa y gabán azul oscuro se levanta de su puesto y antes de entrar a la luminosa habitación le decía a aquella voz suave y femenina que el muchacho le había cedido el turno.
A la salida del edificio donde se encontraba el consultorio odontológico, el hombre de sombrero de copa y gabán prende un pitillo de cigarrillo, levanta su rostro y observa el cielo holográfico, se podía vislumbrar las autopistas aéreas llenas de cientos de elevautos, a lo mejor pensando en tener que ir a tomar un taxi a la estación, ya que las calles son diseñadas sólo para peatones y rutas para bicicletas. El hombre camina dos cuadras, tiene que pasar por la calle ritcol 32, una calle desolada pero tranquila, cruza la avenida, bota lo ultimo que le quedaba del pitillo y entra para pasar por la calle ritcol 32. Mientras caminaba tuvo un raro presentimiento de que alguien lo seguía, pensaba en las noticias de la mañana sobre atracos y asesinatos que se les atribuían a los mutantes, habitantes de las paredes celulares; escucha el sonido de un fuerte paso detrás de él, el voltea pero no ve nada, al volver su mirada hacia su rumbo alcanza a ver una silueta negra frente a él, siente es un fuerte golpe en su abdomen causado por la punta de una gruesa tabla, cae de rodillas sintiendo como es atajada su respiración, luego un puntapié da a parar a su rostro levantándolo hacia atrás, el hombre de gabán chorreando sangre por su nariz y medio sonso ve como aquella silueta iba tomando forma de aquel joven supuestamente universitario, aun no podía ver bien su cara pero era evidente en su forma; antes de que todo se volviera negro para él, lo único que escuchó del muchacho decir fue: -Personas como tú, son las que no merecen llegar al paraíso del portal idílico.
Muerte segura para el ateo de sombrero de copa y gabán azul oscuro.

domingo, 4 de enero de 2009

Boldia. por: Gestapo.

Un mundo que queda dentro de otro, tan sólo imagínatelo, una galaxia microcósmica, llena de miles y miles de estrellas, estrellas que contienen sus propios sistemas planetarios. Una galaxia dentro de otra galaxia y todos en constante armonización, es bello, el espacio es bello e infinito. Dentro de uno de esos cúmulos de galaxias se encuentra una estrella en especial, esta estrella aproximadamente de la misma edad de la nuestra y que coincidencialmente un planeta casi a la misma distancia de ese sol, como nuestro planeta; este planeta se llama Boldia y así se ha llamado decenios de siglos atrás. Es un planeta dos veces más pequeño que el nuestro, sus habitantes son una civilización que no posee una tecnología como la nuestra, pues no la necesitan, su única tecnología es su dominio místico y las herramientas que les proporciona la misma naturaleza, sus casas están hechas dentro del interior de los peñascos, donde sus balcones dan a ver una hermosa vista de aquel azul y ondulante mar y como composición de los cielos, tres lunas. Dentro de aquella piedra inmensa está la ciudad, una ciudad oculta con pasadillos lo más parecido a una comunidad de hormigas, todo rudimentario y con focos de luz eléctrica, no desconocen la electricidad, manipulándola de modo muy diferente a la nuestra, mientras que la nuestra es termonuclear, manipulada por inmensas centrales eléctricas, los boldios la sacan del interior del planeta, la energía es sacada desde el núcleo central. Más adentro de su extraña civilización, a un punto que no se puede seguir, ya que el calor es insoportable y que no pueden por sus medios rudimentarios de protección, no les alcanza para construir los inmensos molinos de viento propulsados por la energía que abstraen del interior del núcleo de la tierra.
Los boldios son semi-reptiloides, de sangre fría y que gracias a su gruesa piel pueden controlar su temperatura corporal a sofocantes calores provenientes del interior de la tierra. En la parte que sustraen la energía son en inmensas calderas, las danzas del fuego moviéndose como las olas del mar, la lava salpica los bordes de los fosos calderazos, miles de boldios obreros arrastrando rocas metálicas sacadas del interior para echarlas a las calderas, el catalizador para generar el producto eléctrico, antes de este procedimiento, rollos gruesos de cables de acero son lanzados de un extremo y son tenidos por una hilera de hombres fuertes que están protegidos de pies a cabeza por gruesos trajes de carnaza. El otro extremo de los cables son introducidos por unos orificios que terminan en pozos de agua donde tal contacto generan la energía eléctrica y que son distribuidas por medio de conductos metálicos donde el agua hace su recorrido hasta su destino final, los tanques de abastecimiento eléctrico, estos tanques están en un área restringida, donde nadie puede entrar ni tener un contacto cercano, ya que emana un alto voltaje de electromagnetismo produciendo alteraciones fisiológicas, o sea mutaciones.
Sólo existen tres continentes en Boldia, estos tres continentes son tres estados de un mismo gobierno, el de ellos mismos, entre los boldios, sus contactos son marítimos, donde intercambian productos alimenticios, artesanías decorativas y artefactos de trabajo. Un boldia puede perfectamente viajar por todo el planeta sin que sea interrumpido por visas ni pasaportes, es libre de caminar por donde quiera. Boldia es su país, es su planeta.
Son muy ricos en fauna y flora, gran variedad de plantas donde sacan sus alimentos y medicinas, en cuanto a su fauna no existen los mamíferos, todos los seres animales contando a los mismos boldios, son hueviparos. Los boldios también son carnívoros y caníbales, el canibalismo es frecuente en ellos cuando se sentencia a alguien a pena de muerte pues en Boldia no existen las cárceles.
Es una civilización muy organizada, no existe la propiedad privada, no existen líderes, todos trabajan unidos en sus específicos papeles, los niños no trabajan sólo cuando cumplen la mayoría de edad, durante su niñez y adolescencia un boldio es educado para su supervivencia, un año antes de cumplir la mayoría de edad es enviado al mar para que demuestre sus capacidades en la caza, él debe traer a la aldea durante el transcurso del año, mínimo tres cuernos de un triptaleoide, una especie de monstruo que vive en el medio del trans-atlántico boldiano. Un año completo en el medio del mar donde gran variedad de monstruos marinos debe enfrentar, muchos de los fuertes y jóvenes boldios nunca llegan, son devorados por las fuerzas marítimas.
Los boldios también son medio acuáticos, puede durar muchas horas debajo del agua gracias a unas branquias que poseen alrededor de las orejas, pues ellos son de descendencia reptiloide, sólo imagíneselos mi querido lector como eran físicamente esta especies medio humano y medio reptil, y eran los únicos reptiles pensantes que habían en el planeta, los demás reptiles eran un equivalente del mono con el ser humano, tenían características análogas en sus comportamientos fisiológicos. Los boldios a diferencia de los humanos tienen sus etapas de apareamiento y sólo lo hacen después de que pasa el invierno; en Boldia la época de invierno son con tormentas de nieve, pueden durar hasta un año en tiempo humano, por tal razón trabajan fuertemente durante tres años para recolectar el abastecimiento invernal.
Cuando pasa el largo invierno los boldios hacen una fiesta en honor a un nuevo resurgir, el baile, donde sólo participan los machos para exhibirse frente a las hembras y ellas deben escoger al macho con el que quiere procrear; los niños después de que nazcan no son cuidados por sus padres, son llevados a la escuela interna donde son educados, sus padres no vuelven a ver a su hijo, al punto que cuando los nuevos jóvenes adultos llegan de su ultima estancia en el mar para ganarse el titulo de ciudadanos de la aldea, sus legítimos padres no sabrán cual de todos los nuevos ciudadanos son sus hijos, los boldios no sufren de estos prejuicios genealógicos, ellos son una única especie y todos son familia y se apoyan como comunidad.
Boldia que queda en una galaxia que se encuentra en medio de un cúmulo de estrellas, donde es imposible imaginarse que está contenida por un inmenso espacio sideral que es contenido por otros espacios siderales, su apariencia infinita de extensión espacial cada vez se va compactando al avanzar su distancia en años luz con otras dimensiones espaciales de este universo infinito, a medida que la visión del lector va expandiéndose y que Boldia no es más que una microcósmica nada en medio de la saturación interestelar, es donde sólo me impresiona saber que aquel microespacio a medida que se encuentra con nuestra dimensión, ésta se va compactando hasta volverse materia sólida, en este caso aquel hermoso planeta con una hermosa civilización que queda dentro un universo que constituye una diminuta parte elemental de aquella materia sólida que conocemos, va terminando de salir de la necesidad orgánica de un perro, que caga dentro del jardín del vecino de su amo. – ¡chíte Perro asqueroso! –grita aquel anciano lanzándole el periódico, maldice con bruscas palabras al animal, va a la cocina y saca un recogedor y una escoba, sale de su casa con mucha dificultad, pues estamos hablando de un viejo que apenas puede mantenerse en pie, pone el recogedor al frente del excremento del animal y con la otra mano de manera temblorosa sujeta la escoba con la que empuja el excremento hacia el recogedor, en ese transcurso de tiempo en Boldia había trascurrido una gran tragedia. Los Tractors, un grupo de mercenarios habían llegado al planeta a invadirla, esta guerra duro casi medio siglo en tiempo boldiano, los tractors que eran de raza guerrera, algo parecido a los bárbaros vikingos en el medio evo, habían destruido por completo el planeta, esclavizándolos y volviendo de su planeta un lugar caótico, los tractors empezaron abastecerse de los recursos de este planeta para construir bombas de nitrógeno termonuclear, es increíble que en otras dimensiones también de manera de escala, existan los mismos elementos químicos que hay en nuestra dimensión humana, y sobre todo que me demuestra, que donde hayan criaturas pensantes, hay guerras prolongadas. De todas maneras Boldia desaparece con un inmenso impacto de un gran meteorito fuera de orbita, eso paso a la vez en el transcurso de la caída del excremento al pote de la basura.

Pablo García.




martes, 23 de diciembre de 2008

El odio. por: Isaac Perdomo.

-Enserio cometían esa barbaridad? –preguntaba todo asombrado Gadamer a Telena. -Imagínate –le decía Telena prendiendo un pitillo de cigarrillo y explicándole los antiguos métodos de la manipulación cerebral, donde la confusión perjudicaría el sistema nervioso, llegando a la locura desde los primeros impulsos de electrodos. - Estos métodos empezaron a evolucionar con perfección desde la nanotecnoligía, -proseguía Telena Sapparina - estos pequeños robots manipulados por robots ordenadores autosuficientes, empezaron a manipular la mente de los humanos, el hombre de aquel entonces no se percataba de lo que estaban haciendo estas maquinas autónomas. La cuestión se empeoro cuando las maquinas se revolucionaron contra el hombre, la guerra había empezado, los getos de maquinas que vivían en bases subterráneas empezaron a crear virus nanotecnológicos para que se esparcieran por el medio y el agua potable, se empezó a ver la muerte por todo el mundo. –Claro esa historia si la conozco –decía Gadamer – en ese tiempo las maquinas instauraron un régimen contra los humanos, el planeta tierra dejó de ser para el hombre, los pocos que sobrevivieron tuvieron que instalarse en colonias espaciales (células flotantes) y buscar nuevos métodos de defensa, después que hubo muchas batallas, algunas ganadas otras perdidas, el hombre pudo crear un imperio gracias a las clonaciones, se crearon clones para la guerra. –Si profesor Gadamer, lo que puedes observar desde está ventana es nuestra patria, debemos protegerla de las maquinas, ellas en cualquier momento pueden volver a atacar, ellos son una nueva raza, ahora tienen el dominio en la tierra, acabaron con todas las formas de vida, ahora la vida allá es artificial, terrenos áridos, imperios que no son ciudades sino fuentes de energía subatómicas, procesadores de programación de mundos similares al de nosotros, los robot se comportan como sus creadores, en cada fuente de poder ellos existen, un mundo que no es real, virtual, me imagino que en sus programaciones deben parecerse a nosotros, no sé, son especulaciones que hago, pero dígame cómo puede ser una sociedad de robot? de maquinas que pudieron ponerse al nivel de los humanos al punto que nos han desterrado de nuestro planeta. –Ellos nunca llegaran a nuestro nivel de pensamiento –dice Gadamer empuñando la mano derecha sobre su escritorio – según determinaciones de la central el ataque está programado para finales de este año, la guerra ahora en adelante será programática, cualquier error será falla de nuestro sistema de programación. –Y si atacan de manera directa, o sea con armamento bélico. -No creo señorita Telena, las maquinas ya destruyeron toda noción de vida natural del planeta tierra, no creo que vengan y nos ataquen de esa manera, a ellos lo que les interesa es posesionarse de nuestra nueva tecnología, si logran internarcen en nuestras programaciones nos eliminarían, recuerde que nuestros productos alimenticios son sintéticos, todo nuestro sistema de vida es basado en programas de diseño, hasta la asimilación del día y de la noche, si llegáramos a estar aunque sea veinticuatro horas sin nuestra tecnología programática, esto se volvería un caos, la gente no entendería lo que pasa. –Entonces debemos empezar a educar a la gente. –Imposible señorita Telena, esto sería un fracaso para la consistencia humana del ideal Xión. –Ba! El ideal Xión!? Cómo es posible que el hombre siga pensando en ideales intangibles, en supuestos. –Tenga cuidado en lo que dice señorita Telena, es verdad que nosotros como científicos seamos concientes de estos conceptos, pero recuerde que desde un comienzo tuvimos que idearnos una estructura de pensamiento masivo, si dejamos que la información se esparza como se hizo en la antigüedad, llegaríamos al mismo punto de error, creando monstruos. –Entiendo y ruego que me disculpe pero eso de estar estudiando historia antigua… -Sí, se le pega a uno esa noción primitiva de la vida, nuestro presente no debe ser así, no debemos tener compasión por los débiles, necesitamos personas fuertes, las maquinas lo son y miren lo que han llegado a ser, son un inmenso imperio que ha desterrado a la raza humana de su hogar de origen. –Las maquinas son así por que son maquinas. – Y el humano un desgraciado por ser sensible, mire señorita Sapparina, soy un admirador también de la historia antigua y admiro como fue la evolución de la maquina análoga hasta la electrónica autosuficiente, somos creadores de un monstruo que nos dio la espalda y antes de darnos la espalda nos clavo el cuchillo, admiro a las maquinas por esa misma razón, por la razón de supervivencia sobre todo cuando instauramos en sus organismos mecánico-electrónico partes orgánicas de humanos, el cerebro de la maquina del siglo veinticinco era un cerebro humano clonado y me imagino que eso usted lo sabe como estudiosa de la historia antigua. – Sí, no es nada desconocido para mí –la doctora Sapparina se queda callada por un instante, pide disculpas y le pide los informes a Gadamer, al salir de la oficina prende un pitillo de cigarrillo, lo aspira con ansiedad y después que sale de la corporación, ella cree sentirse un poco confusa y decepcionada, las maquinas odiaron porque el hombre odiaba, el odio es inherente a la raza humana y ahora también es inherente al de las maquinas autónomas.
Las maquinas ahora odian porque también son humanos.

lunes, 22 de diciembre de 2008

Filosofía. por: Pablo García.


lapicero y corrector sobre papel cartón.

sábado, 6 de diciembre de 2008




Conoscanme!!!!
YO SOY:

OMEGAEQUIS

viernes, 5 de diciembre de 2008

El experimento. por: Gestapo.

Soy un maldito experimento, he visto por generaciones como cambian las costumbres de la gente, me incorporan en un nuevo cuerpo cada vez que el que tengo envejece, ellos no dejan que muera, vuelven y me reviven, con otro nombre, otra vida, de vuelta a ser un niño, luego en adulto y por ultimo en viejo, muero pero ellos vuelven y me hacen vivir, no sé de donde vienen, sólo sé es que vuelven y me resucitan. Una ves me acuerdo, estoy hablando de hace doscientos años atrás, antes de morir en aquel entonces por un accidente automovilístico, ellos me condusieron a un cuarto con diseño esférico, y me dijeron que de todas maneras yo debería saber que soy producto de la inmortalidad, que portal razón ya debería saber del por qué todos esos sueños y pesadillas eran muy comunes en mi mente. Son los que aparecen en mis sueños, en esos momentos mis pensamientos eran confusos, no sentía ni miedo y ni seguridad, me acostaron en una camilla y perdí los sentidos hasta que fue mañana. Al otro día me preguntaba que qué habrían hecho conmigo, cuando me levante, vi por todas partes mi cuerpo, no vi rasguños ni laceraciones de ninguna clase, le dije a June, mi hermanita que me observara la cabeza haber si tenia algo raro, como especie de puntos pero nada, todo estaba intacto y de una deducí que igual que todas esas imágenes que se me vienen a la cabeza, lo de anoche era lo mismo, sólo proyecciones imaginarias y eso puede ser consecuencias de ver mucho cine de terror de serie b. Eso fue hace casi doscientos años atrás y aún no sé si lo que me paso fue real.

Hoy es un día lluvioso, abro el paraguas para caminar hacia el sur, por la avenida principal, unos niños ríen jugando en una esquina con un balón dentro de una bolsa plástica, mientras camino veo el puente que conecta al sur, pienso en las veces que me quité la vida, pienso en esos momento reales como si hubiesen pasado pero dudando a la vez, pero también esa coincidencia de épocas, tengo recuerdos o imágenes en mi cerebro de diferentes momentos de la historia, eso sí, nunca fui nadie importante en la historia, tal vez podría serlo y descartar de nuevo el suicidio, para qué mierda volver a hacerlo, para parar en otra vida más injusta como lo han sido todas, en alguna encarnaciones tuve alegrías, personas que ame profundamente y personas que también odie con todas mis fuerzas, en este momento odio más personas que las que amo. Mis padres murieron producto de la tercera guerra mundial, fui adoptado por un viejo solitario que desde mis diez años me proporciono una buena educación burguesa, él ha muerto hace dos años, me dejó una buena herencia y dejé un veinticinco por ciento para mí y el resto lo doné a un reformatorio, no me gusta tener tanta comodidad para mí solo. Sigue lloviendo aun prolongándose el aguacero más intensamente, los autos pasan demasiado rápido salpicándome los pies pero eso a mí no me importa, por un momento deseo botar el paraguas al río o mejor aún botarme desde este puente, talvez no muera, el río está crecido y no creo que chocara contra el fondo, la corriente me llevaría a las afueras de la ciudad, pero no dudé en ningún instante para botar este paraguas, lanzo el paraguas, mientras que cae, el aire lo dobla bruscamente y revoletea un poco en medio de la borrasca hasta que por fin cae al río y es llevado por la corriente, pongo mi rostro en dirección al cielo en caos, me subo sin dificultad a la baranda del puente, sostengo el equilibrio y levanto mis brazos y cojo impulso para pegar un grito e irme a otra miserable vida, a lo mejor ya no me adoptará ningún burgués solitario, tal vez llegaré a ser un músico, ya es hora pensé en ese instante. –¡No lo hagas! –salio una voz de la nada, era un anciano. –No vale la pena joven, la vida es sólo una –al escuchar aquello que para mi situación era una mentira, decidí no matarme por el momento, bajar de aquella baranda y dirigirme hacia el anciano, a decirle: -Tú qué sabes que es la única vida que tendré? A caso me conoces? por si no lo sabias he tenido más vidas que un gato. –Jajajajajajaja –ríe el anciano parando de reír con dificultad para respirar, tose. –Usted si va morir de una bronquitis, eres muy viejo para mojarse como un chicuelo. –Para tu información es mi última vida, además ya estoy muy viejo y quiero descansar de una vez. –Bien pueda y le ayudo a subir al paral – el anciano da media vuelta y me dice mientras se alejaba: -Ya no tendré más vidas porque han dejado de experimentar conmigo, ya seré libre, no tendré más vidas, tal como me lo dijeron jejejej –y se aleja, dejándome atónito, no comprendía muy bien aquellas palabras pero si sabía que también había reencarnado muchas veces e igual que yo pero que estaba convencido que era su ultima vida. Yo salí detrás de él, dejé que cogiera paso, para cuando salimos del puente, el anciano llega a un pequeño parquecito solitario, pues solitario me imagino yo por la presencia de la lluvia, el anciano entra a un pequeño quiosco de venta de cafés y refrescos, pide el periódico y descarga su gabán sobre un perchero, se sienta en la ultima mesa, acomodando no sólo la silla en la que se iba a sentar, sino la silla de su lado, como si esperara a alguien, no me importó a quien estaba esperando y de una le caí y me le senté a su lado. –Disculpe señor, por qué dices que ya no vas a tener más vidas, a caso se acuerda de sus anteriores? –el anciano prende un cigarrillo salido de la nada, el espeso humo cubre su rostro como especie de veladura. –Eres también un experimento, verdad? –Cómo lo sabes? –No sé joven soy tan viejo desde hace mil años que soy susceptible a algunas cuestiones, me seguiste por eso mismo, porque te llamó la atención lo que dije, compaginaba con el problema de tu angustia pero creo que estamos de suerte hoy –se da la ultima bocanada de ese espeso humo y lo apaga en el cenicero, se levanta sin dificultad para la edad que aparentaba. –Bueno joven, yo me voy a descansar, gracias al azar divino no tienes que esperar más futuras reencarnaciones, ellos te lo advirtieron una vez pero no te dijeron del cómo terminaría la experimentación, yo tuve tres contactos con ellos, en el ultimo contacto me dijeron que dejarían de experimentar conmigo para cuando se tropezara con otro experimentado, pues usted es el experimentado, eso quiere decir que ya moriré en paz, pero no se preocupe joven – me sonríe con satisfacción y continua –ellos también me dijeron que aquel experimentado automáticamente dejaría de serlo, o sea que puedes volver al puente y botarte para descansar en paz, teniendo la seguridad que no te volverás a parar para observar un nuevo amanecer –el anciano toma su gabán, se lo pone y sale de allí perdiéndose entre la multitud que empieza a poblar el espacio por el simple hecho que ha dejado de llover, y yo, atónito de alegría, me devuelvo para el puente a terminar lo que no había terminado.